*ANIMALIA*
*CUMPLEAÑOS*
Por: Maricarmen García Elías
*CUMPLEAÑOS*
Por: Maricarmen García Elías
Huatusco en Línea
Tenía en mente algunos
temas para la columna de esta semana, finalmente me
decidí por compartir una anécdota. Muchas veces en nuestros cumpleaños
recibimos regalos, algunos nos gustan mucho, otros no tanto, y otros
definitivamente nos cambian la vida, de cualquier manera un cumpleaños es
una fecha muy especial que viene acompañada de alegría y de momentos en
familia incluyendo por supuesto a nuestros buenos amigos.
Hace tres años en un día como hoy, me regalaron una perrita, nada tendría
de extraordinario de no ser por lo especial que es este animalito incluso
desde el primer día que la vi. Su mamá era una cruza de shit zu, y mestizo
a la que abandonaron en la puerta de la casa de mis vecinos, ellos la
adoptaron y aunque no la cuidaban mucho no le faltaba comida y techo. Me
ofrecí a esterilizarla pero no pasó mucho tiempo en que el perro de la
familia la embarazara y bueno, ya no hubo nada qué hacer.
Durante el embarazo de “histérica” nombre con el que bautizaron a esta mamá
por sus constantes lloridos que no eran otra cosa más que falta de atención
y cariño, me la pasaba pensando en buenas personas que pudieran adoptar
estos cachorritos que estaban por nacer.
Era tiempo electoral también, así que andaba trabajando en una campaña de
arriba para abajo y dejé de ver a “histérica” hasta que sus dueños me
dijeron que ya habían nacido los cinco bebés. Por el trabajo tampoco pude
verlos inmediatamente hasta que había terminado la campaña.
Recuerdo que mi mamá me llamó por teléfono y me dijo que los vecinos me
querían dar un regalo de cumpleaños; uno de estos perritos. No me agradó la
idea del todo, por muchos motivos, primero porque no estoy de acuerdo en
que los animales sean un objeto de regalo, segundo porque yo ya tenía
cuatro perros a los que nos gusta darles buena vida, tiempo, cuidados pero
sobre todo amor y tercero, porque ya tenía buenos adoptantes para estos
cachorritos.
En el camino iba pensando a cuál escoger, cuál tendría la suerte de vivir
con una activista de los derechos de los animales que lo trataría mejor que
nadie y eso me puso triste. Cuando llegué a la casa de los vecinos, desde
la entrada escuché llantitos y la primera que vino a recibirme muy contenta
fue histérica. En el corredor de la casa había una caja de cartón muy
grande pero no lo suficiente para que los bebés estuvieran a gusto y por
eso tenía tanto lloriqueo.
Me acerqué a la caja y todos eran hermosos parecían ositos panda de
peluche, todos color blanco y negro con un antifaz como de ladrones,
estaban tan enfrascados llorando que ni siquiera se dieron cuenta que los
observaba, menos uno de ellos, uno de ellos no lloraba…. cuando me vio lo
que hizo fue inclinarse en dos patitas y extenderme sus bracitos para que
lo cargara, me enamoré al instante, dije, éste es el perrito que debo
llevarme, lo cargué inmediatamente, no dejaba de lamerme y me di cuenta que
era perrita.
La llamé Padme como la princesa de la Guerra de las Galaxias, la llevé al
veterinario a vacunar y a revisión, la pobre estaba infestada de lombrices
y muy enfermita al ser demasiado bebé, me llamó la atención que tampoco
lloró cuando la inyectaron y se curó rápidamente. A las siguientes semanas
daba sus primeros pasitos de una forma muy graciosa por toda la casa, tuvo
una empatía instantánea con nuestros demás perros que la recibieron muy
bien.
Cuando la paseaba todo mundo tenía que ver con ella, tiene una chispa
especial aunque no es sociable con las personas, no cualquiera le cae bien.
Fue como Padme al igual que mis otros perros se convirtió en parte de la
familia, porque nunca los hemos visto como mascotas.
No hay día que la enana de Padme nos sorprenda con algo, tiene una
inteligencia asombrosa, es muy valiente a pesar de su tamaño, sabe caminar
sin correa, es más ella misma carga su correa, obedece y entiende muchas
palabras, avisa cuando quiere ir al baño, se aprende los caminos, los
perros más grandes la obedecen, sabe cuando estoy triste, feliz, enojada,
etc. Duerme en mi cama y adopta una posición igual a la de un humano con
la cabecita recargada en la almohada y el cuerpecito entre las sábanas, es
quien me despierta temprano y quien me espera cuando llego del trabajo.
Le encanta ir a la playa y echarse en la arena a observar todo, tenemos más
fotos de ella que de nosotros, le gusta cierto tipo de música y ver el
encantador de perros, es melindrosa para comer pero muy bien portada y
sumamente limpia. Por su inteligencia, sensibilidad y actitudes, todos los
días compruebo en Padme, que los animales deben gozar de derechos, tienen
el derecho a una vida libre de violencia y maltrato. Padme ha sido mi mejor
regalo de cumpleaños.
decidí por compartir una anécdota. Muchas veces en nuestros cumpleaños
recibimos regalos, algunos nos gustan mucho, otros no tanto, y otros
definitivamente nos cambian la vida, de cualquier manera un cumpleaños es
una fecha muy especial que viene acompañada de alegría y de momentos en
familia incluyendo por supuesto a nuestros buenos amigos.
Hace tres años en un día como hoy, me regalaron una perrita, nada tendría
de extraordinario de no ser por lo especial que es este animalito incluso
desde el primer día que la vi. Su mamá era una cruza de shit zu, y mestizo
a la que abandonaron en la puerta de la casa de mis vecinos, ellos la
adoptaron y aunque no la cuidaban mucho no le faltaba comida y techo. Me
ofrecí a esterilizarla pero no pasó mucho tiempo en que el perro de la
familia la embarazara y bueno, ya no hubo nada qué hacer.
Durante el embarazo de “histérica” nombre con el que bautizaron a esta mamá
por sus constantes lloridos que no eran otra cosa más que falta de atención
y cariño, me la pasaba pensando en buenas personas que pudieran adoptar
estos cachorritos que estaban por nacer.
Era tiempo electoral también, así que andaba trabajando en una campaña de
arriba para abajo y dejé de ver a “histérica” hasta que sus dueños me
dijeron que ya habían nacido los cinco bebés. Por el trabajo tampoco pude
verlos inmediatamente hasta que había terminado la campaña.
Recuerdo que mi mamá me llamó por teléfono y me dijo que los vecinos me
querían dar un regalo de cumpleaños; uno de estos perritos. No me agradó la
idea del todo, por muchos motivos, primero porque no estoy de acuerdo en
que los animales sean un objeto de regalo, segundo porque yo ya tenía
cuatro perros a los que nos gusta darles buena vida, tiempo, cuidados pero
sobre todo amor y tercero, porque ya tenía buenos adoptantes para estos
cachorritos.
En el camino iba pensando a cuál escoger, cuál tendría la suerte de vivir
con una activista de los derechos de los animales que lo trataría mejor que
nadie y eso me puso triste. Cuando llegué a la casa de los vecinos, desde
la entrada escuché llantitos y la primera que vino a recibirme muy contenta
fue histérica. En el corredor de la casa había una caja de cartón muy
grande pero no lo suficiente para que los bebés estuvieran a gusto y por
eso tenía tanto lloriqueo.
Me acerqué a la caja y todos eran hermosos parecían ositos panda de
peluche, todos color blanco y negro con un antifaz como de ladrones,
estaban tan enfrascados llorando que ni siquiera se dieron cuenta que los
observaba, menos uno de ellos, uno de ellos no lloraba…. cuando me vio lo
que hizo fue inclinarse en dos patitas y extenderme sus bracitos para que
lo cargara, me enamoré al instante, dije, éste es el perrito que debo
llevarme, lo cargué inmediatamente, no dejaba de lamerme y me di cuenta que
era perrita.
La llamé Padme como la princesa de la Guerra de las Galaxias, la llevé al
veterinario a vacunar y a revisión, la pobre estaba infestada de lombrices
y muy enfermita al ser demasiado bebé, me llamó la atención que tampoco
lloró cuando la inyectaron y se curó rápidamente. A las siguientes semanas
daba sus primeros pasitos de una forma muy graciosa por toda la casa, tuvo
una empatía instantánea con nuestros demás perros que la recibieron muy
bien.
Cuando la paseaba todo mundo tenía que ver con ella, tiene una chispa
especial aunque no es sociable con las personas, no cualquiera le cae bien.
Fue como Padme al igual que mis otros perros se convirtió en parte de la
familia, porque nunca los hemos visto como mascotas.
No hay día que la enana de Padme nos sorprenda con algo, tiene una
inteligencia asombrosa, es muy valiente a pesar de su tamaño, sabe caminar
sin correa, es más ella misma carga su correa, obedece y entiende muchas
palabras, avisa cuando quiere ir al baño, se aprende los caminos, los
perros más grandes la obedecen, sabe cuando estoy triste, feliz, enojada,
etc. Duerme en mi cama y adopta una posición igual a la de un humano con
la cabecita recargada en la almohada y el cuerpecito entre las sábanas, es
quien me despierta temprano y quien me espera cuando llego del trabajo.
Le encanta ir a la playa y echarse en la arena a observar todo, tenemos más
fotos de ella que de nosotros, le gusta cierto tipo de música y ver el
encantador de perros, es melindrosa para comer pero muy bien portada y
sumamente limpia. Por su inteligencia, sensibilidad y actitudes, todos los
días compruebo en Padme, que los animales deben gozar de derechos, tienen
el derecho a una vida libre de violencia y maltrato. Padme ha sido mi mejor
regalo de cumpleaños.
*gaem80@gmail.com*
*
De nuevo Tlacotalpan
*
De nuevo Tlacotalpan
Otra vez Tlacotalpan
es la ciudad veracruzana donde más maltrato a los
animales se presenta, además del embalse de toros en las fiestas de La
Candelaria, circula en redes sociales la noticia de que el ayuntamiento de
Tlacotalpan ha ordenado el sacrificio masivo de animales en situación de
calle, contraviniendo la recién promulgada Ley de Protección Animal. Nos
preocupa que una autoridad municipal sea capaz de tomar este tipo de
acciones unilateralmente y sobre todo tratándose de uno de los llamados
pueblos Mágicos y lugar emblemático de nuestro estado, que con estas
decisiones demuestra su poca sensibilidad humana y desconocimiento de las
leyes. Sr. Gobernador, ¿Hasta cuándo se cumplirá esta ley en Veracruz?
animales se presenta, además del embalse de toros en las fiestas de La
Candelaria, circula en redes sociales la noticia de que el ayuntamiento de
Tlacotalpan ha ordenado el sacrificio masivo de animales en situación de
calle, contraviniendo la recién promulgada Ley de Protección Animal. Nos
preocupa que una autoridad municipal sea capaz de tomar este tipo de
acciones unilateralmente y sobre todo tratándose de uno de los llamados
pueblos Mágicos y lugar emblemático de nuestro estado, que con estas
decisiones demuestra su poca sensibilidad humana y desconocimiento de las
leyes. Sr. Gobernador, ¿Hasta cuándo se cumplirá esta ley en Veracruz?
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