DESDE EL ACATEPEC

Por Roberto García Justo.

Huatusco en Línea 

JOAQUÍN SABINA, cantautor y poeta español. Se familiariza con el sentimiento universal que a ratos nos eleva al infinito y en otras ocasiones trata de confundirnos por la ruta que elejimos los seres humanos. Tal vez podamos entender que los genios como el, estrujan el tiempo destapando el cúmulo de sabiduría, descrito con sensibilidad en el lenguaje privilegiados de los letrados. La entrada es genial y al final de su dictado lo rubrica con una sentencia que dice: “Pelearé hasta el último segundo y mi epitafio será: No estoy de acuerdo.”

¡AL LADRON. AL LADRON¡. Parece, por lo que dicen, que sigues preparando oposiciones a Carabanchel; ayer, tu nieta de quince vio como te sacaban a empujones de un cabaret. Parece que no eres mas aquel carterista de guante blanco y alma de artista…los buenos tiempos no han de volver, me han dicho que con la artrosis de los nudillos se te resiste más de un bolsillo, que ya ni cumples con la mujer, me han dicho que cada bolso es una odisea, que una señora en una pelea te ha puesto un ojo a la vi rulé.

Tu que tenías la más exclusiva clientela, en cada golpe dejabas tu sello de autor; mientras a salvo reías y cantabas las pelas alguien pasaba gritando “¡Al ladrón, Al ladrón¡”, ¡si no fuera por los pocos que, haciéndose los locos, apuntalan tu dignidad…¡fingiendo que no se enteran te dejan que los guindes la cartera, para cerrar.

Me han dicho que te revienta que los chavales olviden que los buenos modales son esenciales para robar; tu sabes que para hacer una buena caja no necesita usar la navaja un verdadero profesional, tu siempre mimaste al pobre a costa del rico; lo que era un arte --¡mierda de pico¡--esta empezando a degenerar. Tu que tenías la más exclusiva clientela, en cada golpe dejabas tu sello de autor; mientras a salvo reías y contabas las pelas alguien pasaba gritando “¡Al ladrón, Al ladrón¡”. (Canción).

Quizá no quepa guardar un siglo se silencio por los que acusan a sus enemigos de corruptos. Es una sentencia que como las que más dan resultados, se muestran en el momento apropiado. Y con ese celo de político audaz y lleno de rencores, lo pone en los encabezados de los diarios de todo el Estado Veracruzano. Así lo leen, se enteran y lo comentan. Cuanta razón tienen los que callan, no sea la de malas que por ahí les encuentren algún defecto. Tal vez podamos suprimir la frase principal por una que impacte a los amigos y a los enemigos: ¡ Hay que quemar con leña verde a los YUNES¡.

El reloj marca los tiempos en este año de elecciones. La primera fase esta en actividad, se resuelven con dificultades las negociaciones de las planillas a las alcaldías en este XIV Distrito Local Electoral. Pronto quedaran listas para ser registradas ante el IEV. Y como es tradicional no se ha dejado de crear un clima de acusaciones que no merecen respeto ni atención por parte del electorado. Es de llamar la atención por el carácter tan delicado en que se pronuncian. Ya que los efectos pueden resultar dañinos para los actores de este proceso.

Si consentimos la apreciación de que estamos metidos en un ambiente donde se ha perdido la confianza en los órganos direccionales del País. Estamos seguros de que ya no gozan las Autoridades de una reputación que los encumbre dentro del círculo de honestidad que deben portar en sus responsabilidades. Y esto es una generalidad, porque cuando se refieren a la justicia, la verdad y el buen comportamiento del funcionario público, no es nada agradable escuchar las opiniones que se tienen de ellos.

Retomar el camino de respeto y amor a la profesión y al trabajo dentro de la administración pública, significa, renunciar al dinero fácil, no torcer la ley y cumplir con cabalidad las funciones encomendadas dentro de un código de ética. Y sobre todo, ante los problemas no recurrir a la salida fácil ni poner los renglones de la demagogia al servicio del pueblo. gajustoro@hotmail.com